Por josé Gamondi on Martes, 14 Diciembre 2021
Categoría: Especiales

El día que la vida y la muerte se cruzaron en la misma vereda

Presentamos la continuación del relato del domingo pasado, que nos mandó ayer nuestro amigo Daniel Lecointre. Ingresá acá para ver el video.

"Segundas partes nunca fueron buenas", dice el refrán. Pero este relato, continuación del que publicamos el domingo pasado, parece ser la excepción. Nuestro amigo Daniel Lecointre nos trae una historia conectada con la de la muerte del Vasco Amigorena en manos de un matón, aunque la conexión es sutil. Si te perdiste la anterior, "Los riesgos de una amante demasiado apasionada", tocá acá para verla por IGTV.

El punto de contacto no es el hilo narrativo, sino el lugar donde ocurrieron los hechos: el Club San Jorge, hoy en ruinas y muy caro al corazón de Daniel, que siempre que puede invita a reflexionar sobre las necesidad de recuperar estos espacios. 

Pues bien, en el mismo lugar donde un matón increpó y terminó apuñalando al Vasco, tuvo lugar el comienzo de una historia también signada por la vida y por la muerte, que se encontraron en un instante en la misma vereda. Y como siempre, no podemos adelantar nada más, ni siquiera un atisbo del cuento, porque lo estaríamos "espoileando"

Tocá la foto de portada o ingresá a este enlace para verlo por IGTV: https://www.instagram.com/tv/CXd0ikXN-iy/ 

Dejar comentarios