Entrevista al Lic. Marcos Giménez Zapiola en el marco de la jornada técnica "La Ganadería que Viene", donde resume los puntos centrales de su propuesta de manejo.  

La idea era hacerle a Marcos Giménez Zapiola dos preguntas básicas: ¿Qué tiene que hacer un productor para manejar su hacienda en un marco de bienestar animal?; y ¿Cuánto más puede llegar a ganar por eso? Naturalmente, se las hicimos al revés, porque si algo nos fue quedando claro durante el curso de las disertaciones de La Ganadería que Viene, es que además de una cuestión humanitaria y de respuesta a demandas sociales, el bienestar animal es una pieza clave en la eficiencia y la rentabilidad de la actividad ganadera.

Aprovechamos una pausa en la disertación teórica, conversamos con él y acá te presentamos un resumen de la entrevista (que podés ver completa en video ingresando acá ), de la cual extrajimos tres ideas centrales: 1) El productor puede ganar más dinero al producir animales con buenas prácticas de bienestar animal; 2) Esto mejora la calidad de la carne y reduce las pérdidas en el proceso y el estrés en los animales y 3) No se requieren inversiones para implementar estos cambios.

"La gente dice que el bienestar animal no le interesa porque nadie se lo paga, y es cierto que nadie se lo paga explícitamente. Si bien hay programas que dicen que se lo van a pagar, pero yo creo que son los menos interesantes. Lo que sí sucede es que si uno produce hacienda con buenas prácticas, el producto es mejor. O sea, la carne de un animal bien tratado es mejor, tiene menos pérdidas. El frigorífico, que está manejado por gente que no es ni filántropa ni estúpida, sabe perfectamente qué remitentes mandan tropas parejas, bien tratadas, sin machucones, porque un machucón por ahí descalifica toda una res", remarcó Gimenez Zapiola.

"Pero lo más importante es otro concepto, beneficios que no son en moneda sino que son costos y beneficios invisibles, que como no aparecen en la contabilidad uno piensa que no son costos, pero por ejemplo, mermas en la preñez por mal manejo es un costo. Muchas veces la tasa de preñez es baja, se hace IATF y sacan el 50% y están felices de la vida, pero no cuentan que un 50% lo perdieron. Y bueno, está visto que cuando hay perros mirando nomás, baja la preñez. Ahora, ¿cuánta gente tienen claro que eso sucede mirando nomás? Hay otros que son con perros garroneando y eso es más todavía. No es el perro solamente, es trabajar un poco más suave. Se puede trabajar muchísimo más suave sin que sea más trabajo, de hecho es menos trabajo", agregó.

"Hay más pérdidas por maltrato, el destete salvaje que se hace normalmente tipo culata de camión, la gente acepta que se pierde un 10% en cuestión de días nomás, eso pensando en el peso del ternero, de la vaca nadie piensa, pero la vaca sufre muchísimo también. Y eso es un tema de buenas prácticas o de bienestar animal, porque el destete en mamíferos es algo natural, no estamos haciendo algo antinatural, la forma en que lo hacemos es antinatural. En el vacuno o el equino, un día la madre deja de amamantar y lo patea, pero siguen viviendo juntos, la separación se produce después y no hay ningún estrés. Entonces ahí tenemos el 10% de pérdida, es terrible, hay formas de destete que son con el destetador o a través del alambrado, que primero terminan con el amamantamiento y el ternero y la vaca se acostumbran más o menos en 3, 4 días a eso, pero están en contacto. Para mí el ideal, como criador, es que sigan juntos y pasen el invierno juntos, si no lo voy a vender. Por ejemplo, las terneras de recría, las que voy a usar para futuras madres, las dejo con la madre, si total, no le van a cortar el celo a la madre, no la van a comer viva, pero está con la madre, y la verdad que estar con la madre es mejor. Así que son pequeños detalles, pero producen pérdidas que la gente no se da cuenta, porque piensa que está en la naturaleza que los animales sufran. No, no está en la naturaleza, por lo menos estas cosas no, las podemos moderar y va a ser menos pérdidas, o sea, indirectamente va a ser más dinero que nos va a entrar", expresó Zapiola.

"Las cuatro pautas que recomiendo hoy no requieren ninguna inversión, porque se supone que todo el mundo viene trabajando distinto de eso, pero viene trabajando. O sea, la estructura la tienen, solo hay que trabajar distinto: Para empezar, no hay que llenar el toril al taco hacinando la hacienda, hay que cargarlo a lo sumo a dos terceras partes de su capacidad y dejar un tercio de espacio libre. Hay que tratar de cargar no más de tres mangadas por carga de toril, para que que salgan para la manga rápido y se vayan rápido al corral de salida, no estén instaladas ahí estacionadas en el toril, media hora, una hora, etc. Hasta ahí vamos gratis", señaló.

"Tampoco hay que cargar la manga al taco, hay que cargar mejor un animal de menos que un animal de más. O sea, los animales tienen que tener un mínimo de espacio libre para moverse dentro de la manga. En cuanto se sienten trabados, que no se pueden mover, se desesperan y ahí empiezan nuestros problemas. Otra que también es gratis: en vez de vacunar a la buena de Dios, hay que vacunar de atrás para adelante, porque eso nos permite acceder a la posición adecuada para aplicar la vacuna sin anticiparle el hecho al animal. O sea, cuando estamos para dárselo, recién ahí se da cuenta. Entonces no es que está mirándonos, que nos acercamos y tratando de acomodarse, esconder la cabeza y todas las cosas que hace", agregó.

"Por último, cuando movemos los lotes de un corral de entrada o grande hacia la manga o el cepo, hay que ir cortando los lotes sucesivamente en lotes cada vez más chicos. O sea, en el cepo entra 1, en la manga entrarán 7, pongámosle en el toril, pongámosle 3 mangas, entran 21, en el antetoril, 13 toriles, son 63. Y bueno, de ahí para atrás, no sé cuánto, para mí son unos cuantos, ya 63. Podemos tener por ejemplo 200 animales, son 3 tandas de esta secuencia", sugirió.

"Cada vez que vamos a buscar el toril con 20 o 40 animales, no tenemos que ir a buscar 200 porque en cada pasada van quedando menos y los últimos 20 o 30 van a ser unos leones. Con este sistema, los leones se van primero. Los leones son los que primero salen, son unos leones porque no nos soportan cerca, así que quieren irse rápido. Si los manejamos así, se van antes. Hasta ahora no hemos gastado un peso y se nos abre una puerta a un montón de beneficios. Yo siempre digo, prueben esto, después por supuesto que hay más, pero yo considero que solo con esto se logra lo que yo estimo en un 70% u 80% de la mejora que se puede conseguir en cuanto a lo que se llama bienestar animal. Todo lo demás son chiches, detalles, cosas que cuestan plata, además, cosas donde el retorno de la inversión no es tan visible. Acá la única inversión es que convencer al personal de trabajar así, y asegurarse de que lo haga".

Contundente, don Marcos. Te dejamos varios links para que puedas disfrutar y aprovechar de todo lo que nos dejó en su paso por La Ganadería que viene:

Entrevista completa Lic. Marcos Giménez Zapiola: https://youtu.be/j7lPqImJ_G0

"Buenas Prácticas de Manejo de Ganado", parte teórica 1 https://www.youtube.com/watch?v=u_JYooNRK_0&t=4510s

"Buenas Prácticas de Manejo de Ganado", parte teórica 2 https://www.youtube.com/watch?v=u_JYooNRK_0&t=10302s

Parte práctica, manejo en corrales y cargador https://www.youtube.com/watch?v=u_JYooNRK_0&t=16125s

Parte práctica, manejo en manga https://www.youtube.com/watch?v=u_JYooNRK_0&t=17375s

Más info y fotos: www.laganaderiaqueviene.com.ar